A veces nos enfocamos en orar solo por nosotras y nos olvidamos de los demás, incluso por nuestros hijos. Esto puede ser porque, aparentemente, no hay ninguna razón en concreto para hacerlo.
Por eso, hoy compartimos algunos motivos por los que debes orar por tus hijos.

7 motivos para orar por tus hijos

1. Ora para que tengan una relación personal con Jesús

No importa que nosotras seamos mujeres de oración o de fe, lo cierto es que nuestros hijos también deben tener una relación personal con Dios. Deben creer en Él por sí mismos y no solo porque les enseñamos. Ellos también deben vivir para Cristo y vivir experimentar en carne propia el amor que Él da.

2. Ora para que siempre sean valientes

Si nuestros hijos no tienen la valentía suficiente, no podrán enfrentarse a los retos que día a día tenemos que superar. Ellos deben tener fortaleza emocional, física y también espiritual. Ora por este aspecto y notarás una gran diferencia en ellos.

3. Ora para que sean responsables en toda área de su vida

No ores por tus hijos para que sean responsables solo en la escuela, sino también para que lo sean en cada área de su vida. Eso también implica la responsabilidad con el Señor.

4. Ora para que tomen sabias decisiones

No basta solamente con decirles qué es lo malo o lo bueno para su vida. Ellos tienen que tener mucha sabiduría para tomar decisiones. Empezando desde qué clase de amigos elegirán, qué carrera elegirán y cómo deben encaminar su futuro.

5. Ora para que sean personas de impacto

Nuestros hijos, sin depender de la edad que tengan, deben ser luz y sal. Ellos también deben marcar e impactar la vida de los demás. Deben ser una influencia positiva a todas las personas de su generación.

6. Ora para que sean íntegros

No solo para que sean íntegros en el aspecto físico, sino también para que sean íntegros moral y espiritualmente. No podemos estar detrás de nuestros hijos para ver qué hacen o lo que miran, pero si oramos por ellos, les estaremos protegiendo de cosas malas.

7. Ora para que tengan madurez

Se suele confundir a la edad con una persona con la madurez; y por más que nuestros hijos crezcan físicamente y vayan alcanzando cierta edad, no significa que sean maduros.

Es importante orar para que adquieran madurez en sus pensamientos, forma de hablar, manera de relacionarse o la gente y hasta en su relación con Dios. Si oramos por este aspecto, ellos estarán mejor que nunca.

Ora por tus hijos. Ellos son un regalo precioso del Señor y debemos velar por ellos mediante la oración.
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*La imagen destacada es de licencia gratuita, pero reconocemos al autor Skalekar1992 de Pixabay.